Una receta de Ana Merchán. Pozoblanco

Aguja de Cerdo deshuesada.

Cebolla.

Harina.

Vino blanco.

Tomate frito.

Zanahorias.

Azafrán.

Aceite.

Sal.

• Solicitamos que nos deshuesen la aguja de cerdo y la introducimos en una red.
• Ponemos aceite en una olla a presión y ponemos la cebolla para que se vaya friendo lentamente. Cuando veamos que va quedando transparente colocamos el trozo de carne de aguja, rebozada en harina, dentro de la olla y le vamos dando vueltas hasta que se rehogue. Cuando haya adquirido un color dorado, le añadimos un buen chorro de vino blanco, un poco de tomate frito y la zanahoria troceada. Dejamos hasta que se consuma un poco el vino, se cubre de agua y se incluye sal y azafrán. Cerramos la olla y dejamos poco más de media hora.
• Abrimos y pinchamos la carne, si está tierna, la reservamos en un plato.
• Por otro lado pasamos la salsa por el pasapurés para dejar sin tropezones. Si vemos que tiene mucho caldo se le retira un poco.
• Mientras, dejamos que la carne se enfríe y cuando lo esté, la cortaremos en rodajas. Las colocamos en una cazuela y las vamos regando con el caldo. Dejamos todo junto unos minutos.